El avión atravesó la capa de nubes
y un sol radiante inundó la cabina en el mismo momento en que el pasajero 11F
releía el restrictivo documento. La nueva normativa municipal resbaló de sus
dedos lacios. Se quitó la chaqueta y descubrió un ajustado suéter de rayas
blancas y negras a juego con su rostro de mimo callejero. Se incorporó
calándose un bombín, repartió sonrisas mudas por última vez y accionó la puerta
de emergencia. El avión se detuvo, en seco, sin inercia. El mimo recorrió el
ala hasta llegar al filo. Luego voló al vacío. Cerrada la puerta, el avión
prosiguió con una carta abandonada y un asiento que nadie podría ocupar, rumbo
a la próxima ciudad con calles de tránsito plomizo y monótono.
Este microrrelato ha sido publicado en la página 4 del número de noviembre del diario local L'independent de Barberà.
Este microrrelato ha sido publicado en la página 4 del número de noviembre del diario local L'independent de Barberà.
ResponderEliminarQué barbaro, Fernando ¡Ya ni los mimos se salvan, che! Me gustó especialmente que el avión se detuviera en seco y el mimo caminara sobre el ala. La ilustración complementa muy bien lo que uno va visualizando a medida que lee.
Si, como sospecho, este micro partió de la frase final del último libro de Vargas Llosa (corregime si me equivoco), creo que supiste retrabajar muy bien la frase para que no quedase igual. Yo también hice el intento en el Concurso de Prisa Radio; el fruto de mis esfuerzos podés leerlo aquí:
http://mariangelesabelli.blogspot.com.ar/2013/10/cuasi-alteridad.html
Un saludo, Mariángeles
Sí, si, lo presenté a Prisa.
EliminarUn saludo.
Hola Fernando, por lo menos este micro se ha salvado de las nubes que lo llevaron al cielo, y ha encontrado su sitio en la página 4. Me ha gustado la idea, el mimo, y como la desarrollas. Lástima que el mimo cayera...
ResponderEliminarBesos Fernando.
Últimamente parece que la clase política se limita a proponer leyes cada vez más restrictivas. Ahora cargan contra los artistas callejeros...
ResponderEliminarBesos Laura.
tienes un don especial, Fernando
ResponderEliminartienes también un premio en mi blog. (en realidad es una cadena )
Hola Aniagua. He estado dos días sin internet... así que no había visto tu comentario.
Eliminargracias por tus palabras.
Ahora me paso por tu casa, a ver...
Hola,Fernando, es la primera vez que visito tu blog. Mi felicitación por la fantasía de tus microrrelatos, en los que se vislumbra una crítica social hacia normativas restrictivas, ante las cuales el protagonista decide huir, volar, no aterrizar en este mundo tan canijo, y ser libre en su vuelo personal.
ResponderEliminarTe seguiré visitando.
Saludos.
Bienvenida Fanny. Me alegro de que te haya parecido interesante lo que has visto por aquí.
EliminarUn abrazo.