Estamos de enhorabuena!!! En el concurso de la microbilioteca del mes de enero, el micro que os dejo aquí llegó a las deliberaciones finales. Espero que os guste.
Os dejo en lace a la entrada de la Microbiblioteca donde hacen eco de la noticia.
http://lamicrobiblioteca.blogspot.com.es/
Espero vuestros comentarios. Gracias.
-¡Cómete la
sopa de una vez! -Grita el padre, aunque sabe que su hijo odia la sopa de
fideos.
Sumiso, el niño hunde la cuchara
entre los fideos y observa como se enroscan en espirales infinitas. Algunos
parecen estar como pez en el agua en el caldo hirviente, dispuestos a
escaldarle la lengua, como esas almas en pena que disfrutan de su destierro
infernal, como su padre. Otros en cambio, intentan escapar del plato. Reptan
como gusanos blandos y largos, como serpientes acorraladas huyendo de un
incendio inexorable, que de forma inequívoca, terminará consumiéndoles, como su
madre.
Lo leí allí. Muy bueno el relato, Fernando. Y también el dibujo que lo acompaña.
ResponderEliminarUn abrazo.
Felicidades, company. Qué bueno. Pobre hijo, pobre madre, pobres fideos...
ResponderEliminarUn abrazo, Fer.
La ilustración ya advierte de lo que viene a continuación, perfecta combinación. Enhorabuena, es precioso
ResponderEliminarHola Fernando.
ResponderEliminarPues no lo había visto en la microbiblioteca, claro, que estás por local.
Ya me gustaría saber usar a mí los símiles. Muy bien concentrada toda la narración en un plato de sopa. Felicidades.
¡Soberbio relato, Fernando! No puede sorprender que haya llegado dónde ha llegado. Me gusta cuánto le aporta la ilustración con la que lo acompañas.
ResponderEliminar¡Enhorabuena, caballero!
Un abrazo,
La vida está en los pequeños detalles, muy bueno Fernando, y los nños son especialistas en ver la vida, lástima que cuando crecemos vamos perdiendo esa cualidad y nos fiamos más de lo que creemos saber, je je.
ResponderEliminarEnhorabuena, dudo que se te resista mucho más.
Un abrazo.
Enhorabuena Fernando. La verdad es que impresiona esa sopa de fideos. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Enhorabuena Fernando, sin duda el relato es sobrecogedor.
ResponderEliminarUn silogismo perfecto y sobrecogedor de cómo se vive bajo un mismo techo/plato la vida desde dos perspectivas totalmente distintas.
Una sopa que más que de fideos es de letras, por todo lo que dice y todo lo que encierra en ese caldo.
Besos mediterráneos.
Muy buenos ambos, ilustración y micro. Consigues que la angustia que transmite tu texto nos quite las ganas de cenar, al menos en esa mesa.
ResponderEliminarUn abrazo y enhorabuena