Otra propuesta arriesgada para el REC de esta semana.
Déjala a ella que sea pájaro, ha dicho el rey mordisqueando un trozo de cerdo asado mientras ve volar a la princesa junto a las otras aves migratorias desde la ventana de la torre del homenaje con vistas a las almenas en las que la soldadesca prepara ballestas y catapultas para defender desde el adarve a los labriegos que cruzan el portón tras arrasar los campos de cultivo con objeto de evitar el aprovisionamiento del enorme ejército enemigo que avanza hacia ellos cruzando la playa donde se erige la atalaya en la que Dédalo está a punto de empujar a su hijo.
Menos mal que se preocupa de defender a los labriegos y no del vuelo de su hija.
ResponderEliminarTal vez, cuando quiera darse cuenta está estrellada contra el suelo.
Que importa un hijo cuando se trata de defenderse o atacar al enemigo...
Un poquito de humor negro?
Besos mediterráneos.
Hola Gala... he intentado ser cámara... dej la interpretación del todo al lector.
EliminarUn beso.
Pues mi interpretación es que el rey deja que la princesa se suicide porque sabe que la batalla está de antemano perdida y que si cayese en manos enemigas...
EliminarHola, conchi. Sin duda otra lectura que da coherencia al texto.
EliminarMe alegro de tenerte por aquí.
Un beso.
Buen relato Fernando. A punto de ser invadido su reino y el rey dándose un festin y sin importarle el destino de su hija.
ResponderEliminarYo diría que tu rey se había vuelto loco.
Enhorabuena y suerte para la próxima vez.
Un saludo
Loco, egoista, sabedor de su crudo destino... ¿quien sabe?
EliminarMuchas gracias por pasar y comentar.
Un saludo.
ResponderEliminarNo solo el vuelo es en apnea, la lectura también; es todo un desafío llegar planeando al punto final sin quedarse sin aire... Me gustó mucho tu propuesta para el ReC (la mía también quedó en el camino, pero más allá del resultado, me entusiasma mucho el desafío... ahora habrá que pensar en la frase de turno, a ver qué sale). Cariños, M.
Me temo que es mejor leerlo mentalmente... al menos es menos peligroso Mariángeles.
EliminarMuchas gracias por pasar y comentar... ya casi tengo preparado el de esta semana...
El título lo dice todo. Un largo recorrido en apnea volando por todo lo que ocurre en el reino y sin respirar.
ResponderEliminarLo de menos era que la hija volara.
Saludos.
Tienes razón enmascarado, esta vez el título intentaba ser una especie de aviso.
EliminarSin resuello nos deja esta frase tan bien sostenida y equilibrada, tan densa que nos obliga a volver al principio para comprender exactamente por qué empieza y termina esta escena de metamorfosis.
ResponderEliminarUna apuesta valiente, quizá a conservar para mejor fin.
Abrazos
la verdad es que dudo que me cojan algún texto este año, porque me están saliendo cosas de lo más extrañas...
EliminarYa van dos cursos en los que me tachan de arriesgado y ambicioso (en cuanto a lo que intento hacer) Vamos que me complico la vida... pero ¿Es que alguien cree aún que la vida no lo es?
Un abrazo Susana... a ver si podemos acercarnos el jueves a la presentación...
Argggg aquí termina mi día!!!
ResponderEliminarJo, lo de la frase del tirón es muy interesante porque crea ya una atmósfera muy angustiosa y una prisa por saber qué pasa.
Muy valiente
Abrazos
Gracias. Me sorprende que nadie haya atacado mi intento... valiente o loco, pero me lo he pasado muy bien.
EliminarUn abrazo.
Me gusta el intento de conquistar la cima. Me parece tan original como asfixiante el texto, y aunque su lectura se complica un poco resulta grato encontrarse con propuestas diferentes.
ResponderEliminarFelicidades por ser el padre.
Una perta.
Gracias cortacuentos. Era consciente de que estaba poniendo en un aprieto al lector, pero era interesante saber vuestra opinión.
EliminarArriesgada es el calificativo correcto, Fernando. Como dice Susana, yo también me he quedado sin resuello, por lo que he tenido que lanzarme a una relectura más pausada.
ResponderEliminarEn cualquier caso, me gusta la selección del lenguaje, el enfoque elegido y el fondo de la trama de este micro.
Abrazos,
Gracias Pedro. Se que no es lo habitual, pero ¿porque no intentarlo?
EliminarUn abrazo.
¿Dónde está el boca a boca para el lector ....? ...
ResponderEliminarAh! que se te ha olvidado ...
¡Madre mía Fernando! y yo : leyéndolo en voz alta (con el ruido que hay) para ver si me enteraba... y a poco me caigo redonda.
¿Mi opinión? : ¡¡arriesgadísimo!!. Pero yo valoro tu atrevimiento, porque es distinto, asfixiante, agobiante, inteligente, cuenta una historia, la cierra, y además ¡tiene relectura!. ¿No eran eso los micros?....
Un beso Fernando que voy por agua para recuperarme.
Ánimo Laura. Recupérate.
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
He llegado al final del relato con la última gota de aire de mis pulmones pero verdaderamente ha sido una bocanada de oxígeno para la falta de originalidad que abunda entre los microrrelatos empezando por el mea culpa escribimos muchos y demasiado lo único es que al leer el ganador lo siento por él pero su relato me sonaba a algo ya leído micros tan originales como el tuyo será difícil que sean vencedores.
ResponderEliminarUn beso
Pues que decir Ana. Muchísimas gracias por tu valoración.
EliminarCreo que estoy en proceso de investigación y lo visitantes de mi casa corréis el riesgo de pagar los platos rotos.
Un beso y gracias por pasar y comentar.
Hola Fernando. Yo, al ritmo que van mis neuronas, he tenido que leerlo varias veces, no digo cuantas. El dibujo es absolutamente fantástico, ese contrate de negro y azul es maravilloso. El micro me ha encantado. Tienen también ese punto de locura que continúa en la línea del mío. Una familia como una cabra. La hija, quiero yo pensar continuando con el toque fantástico, que ha logrado escapar con las aves migratorias y que los soldados lograran defender a los labriegos. La figura del rey no me convence. Yo no estaría tan seguro en mi castillo. Buen intento. Espero verte pronto seleccionado una de estas semanas. Un abrazo de pájaro.
ResponderEliminarLa figura del rey ya no convence a casi nadie. Je je je. Un beso.
ResponderEliminarPor Dios, casi me ahogo (la primera vez he abandonado a la mitad), suerte que sólo son cien palabras, je je. Muy bueno Fernando. Me gustan mucho las propuestas "diferentes" para el ReC, es muy difícil que nos nos acabemos pareciendo todos.
ResponderEliminarUn abrazo.